Gran parte de las muertes que se producen cada año se desatan debido a la hipertensión. A veces los síntomas pueden ser sangrado nasal, mareos y dolores de cabeza, pero no siempre es una enfermedad manifiesta, por ese motivo es de vital importancia controlarla.

Es sencillo y se puede monitorear en casa. Cualquier persona puede tomarse la tensión y es de vital necesidad para aquellas que presentan un cuadro de hipertensión.

“El paciente que tiene niveles altos debe medirse la presión en su casa a la misma hora todos los días y anotar los resultados. Esta tarea le ayudará notablemente al médico para saber si el medicamento que está tomando le está siendo de utilidad o si necesita modificarlo.

También es útil para aquellas personas que no padecen síntomas a modo de prevención. Es una manera de controlarse y tener tranquilidad tanto el paciente como el especialista”, recomienda el cardiólogo argentino Juan Ernesto Solís.

Hay dos diferentes instrumentos para medirse la presión en casa: el monitor aneroide que tiene un medidor que se lee observando las medidas que indica la aguja y el brazalete se infla a mano.

El monitor digital es la otra opción y las medidas aparecen en la pantalla. Cabe señalar que el primero de los monitores es más delicado, se puede dañar con facilidad y perder así su precisión.

El segundo tensiómetro es más práctico y sencillo de utilizar ya que lo hace todo por sí solo y muestra en una pantalla tanto el valor máximo como mínimo, pero es muy sensible a los movimientos.

Por tal motivo no se debe hablar cuando está en funcionamiento y mucho menos, moverse. Ambos se consiguen sin problemas en las farmacias o tiendas especializadas.

La prevención es muy importante. “La hipertensión no avisa. Hay que estar muy alertas ya que la presión sanguínea alta aumenta el riesgo de insuficiencia cardíaca, ataques, accidentes cerebrovasculares e insuficiencia renal.

Es recomendable llevar un registro diario de las medidas y tener en cuenta la alimentación, otro punto fundamental a no perder de vista en estos pacientes”, aconseja Solís.

El control en el hogar es también importante sobre todo para aquellas personas que se ponen muy nerviosas en los consultorios y arrojan niveles más altos de lo normal, síndrome que se denomina “hipertensión de la bata blanca”.

”La gente debe saber que una toma que dé alta no significa que se tenga esta enfermedad así como tampoco hay que guiarse por una toma que dé niveles normales en un paciente y descartar cualquier alteración ya que el control debe ser regular para determinar si existe o no un problema”, expresa el especialista. 

Cómo tomarse la presión con el tensiómetro aneroide

– Descansar unos cinco minutos.

– Sentarse en posición cómoda sin doblar las piernas y brazos.

– Colocar el brazo izquierdo si es diestro a la altura del corazón.

– Envolver el brazalete sobre el brazo sin ropa.

– Bombear la pera con rapidez hasta alcanzar 30 mm HG más de la máxima esperada o 30 mm HG por encima del momento en el que desapareció el pulso radial

– Cuando se escuche el primer latido se debe observar el valor que marca la aguja y así se tendrá la presión arterial máxima

– Desinflar lentamente el mango. Cuando no se escuchen más latidos, se tendrá la tensión arterial mínima. 

Consejos para prevenir la hipertensión arterial

– No beber alcohol.

– No fumar.

– Realizar ejercicio de tres a cinco veces a la semana durante treinta minutos.

– Reducir el consumo de sal.

– Mantener una dieta sana. 

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