Es conveniente antes de comprar
plantas para el hogar, saber si se cuenta con
poco o mucho tiempo para realizar un mantenimiento apropiado.

Si la respuesta es negativa, no hay que deja de lado la posibilidad de tener un
bonito y colorido ambiente natural.

Algunas propuestas para tener en consideración a la hora de visitar un vivero
son:

1.- Palo de agua:
se adapta muy bien a ambientes de media sombra ya que no pueden recibir mucho
sol. Solamente hay que regarlo una vez a la semana. Sus hojas son grandes y
brillantes.

2.- Drácena africana:
sus
hojas son alargadas y coloridas. Durante el invierno debe mantenerse seca y
en verano hay que regarla una vez a la semana. Necesita muy poca agua ya que
contiene en su interior reservorio de agua.

3.- Aloe:
Soporta climas extremos y necesita ser regado al menos una vez a la semana en
verano. Debido a su origen africano, en el interior de sus tallos y hojas se
encierra un importante reservorio de agua.

4.- Helechos:
No necesitan gran cantidad de luz para desarrollarse. Si se colocan en el
exterior, hay que situarlos en un lugar en donde reciba abundante sombra. Regar
las raíces cuando estén secas, una vez a la semana.

También se pueden pulverizar las hojas de vez en cuando.

5.- Cactus:
no requieren grandes cuidados. Hay muchas variedades de cactus con flores, de
distintas formas y tamaños. Con ellos se puede crear un jardín muy creativo y no
hay que regarlos todas las semanas.

Pueden estar dentro o fuera de la casa siempre y cuando reciban sombra.

6.- Hortensia de invierno:
esta planta de exteriores soporta muy bien los climas adversos. Sus hojas son
grandes y brillantes y florece dos veces al año. No requiere de muchos cuidados
y solamente hay que regarla en verano cuando las raíces se encuentran secas.

7.- Ficus:
ideal para interiores. Necesitan riego cada diez días aproximadamente. La
fertilización y el abono deben efectuarse cada dos meses.

8.- Cola de ratón:
contiene hojas muy carnosas y resiste muy bien en ambientes secos. Regar una vez
cada dos semanas.

Más allá de que estas plantas requieran muy pocos cuidados, se debe estar atento
ante posibles requerimientos. La limpieza junto con el riego es fundamental para
evitar que las plantas se enfermen.

Por tal motivo, lo mejor es antes de regarlas, con la ayuda de un algodón húmedo
limpiar las hojas.

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